lunes, 13 de enero de 2014

Balón de Oro FIFA 2013

Como cada año, voy a tratar de analizar objetivamente los méritos de cada uno de los candidatos al Balón de Oro FIFA 2013 para determinar cuál debería ser el orden justo del podio en Zúrich.

Recordamos los criterios del prestigioso galardón:

1. Resultados obtenidos individual y colectivamente durante el año.
2. Clase del jugador.
3. Carrera profesional.
4. Carisma y personalidad.

PD: Estoy casi seguro de que lo gana Cristiano, y hasta el momento de realizar esta entrada dudaba entre él y el francés, pero al final creo que he decidido correctamente.



Balón de Bronce: Lionel Andrés Messi - Campeón de la Liga BBVA siendo además el máximo goleador; semifinalista de Champions y campeón de la Supercopa de España. 42 goles y 13 asistencias en 2013. En la temporada pasada, en la que se proclamó campeón de Liga, anotó 20 goles en 15 partidos y se proclamó pichichi de la competición con un total de 46, lo que le valió también para conquistar su tercera Bota de Oro. En Champions, fue decisivo en cuartos de final con su doblete ante el Milan, y anotó un gol en París que contribuyó al pase de su equipo a las semifinales, pero por problemas físicos apenas jugó en la vuelta. Totalmente desaparecido frente al Bayern, donde su equipo cayó por 4-0 en Múnich. Pese a que fue convocado en la vuelta, no tuvo minutos en la derrota del FC Barcelona por 0-3 que supuso la dolorosa eliminación de los azulgranas. Siguió con problemas físicos tras vacaciones, por eso llegó a perderse hasta doce partidos de la presente campaña, culpa de una lesión en el bíceps femoral de la pierna izquierda. Lleva marcados 8 goles en 11 partidos en Liga, y 6 en 3 de Champions. Con su selección anotó tres goles de penalti en los dos partidos de clasificación para el Mundial, frente a Paraguay y Venezuela. El crack argentino, tras varios años siendo el mejor jugador del mundo, se ha perdido muchos partidos en 2013 y no ha resultado lo desequilibrante que suele ser en enfrentamientos decisivos, tanto frente al Real Madrid en Copa del Rey -apenas apareció en los dos partidos, ida y vuelta- como frente al Bayern en semifinales de Champions.


Balón de Plata: Cristiano Ronaldo dos Santos Aveiro - Subcampeón de la Liga BBVA, semifinalista de Champions y subcampeón de la Copa del Rey. 66 goles y 18 asistencias en 2013. Los mejores números de la carrera del portugués, que no fueron suficientes para conseguir ni un solo título en todo el año. La temporada pasada, Cristiano fue el máximo goleador de la Champions (12) y el máximo goleador de la Copa (7, junto a Diego Costa), y acumuló exhibición tras exhibición en la Liga. En la máxima competición continental llegó a marcar en seis partidos consecutivos, cinco de ellos en 2013, que acercaron al Madrid al título, pero su contribución no fue suficiente en semifinales frente al Borussia de Dortmund, quedándose en blanco en la vuelta, fallando una de las ocasiones más claras del partido. En Copa, tras eliminar al FC Barcelona con una actuación portentosa en el Camp Nou (marcó un doblete), no estuvo nada fino en la final que perdió contra el Atlético de Madrid (1-2) en el Bernabéu, pese a su gol inicial. Producto del desquicio, acabó siendo expulsado en la prórroga. La primera vuelta de la 13/14 del madridista ha sido un escándalo: 20 goles en 17 partidos de Liga y 9 en 5 de Champions, liderando las dos clasificaciones goleadoras. La guinda la puso al final de 2013, cuando clasificó a su selección para el Mundial 2014 en la repesca frente a Suecia: firmó cuatro goles, tres de ellos en el Friends Arena sueco, para ganar el partido por 2-3 y la eliminatoria por 2-4. Quizás el jugador más en forma del mundo -con permiso de Suárez-, pero los resultados colectivos pesan.



Balón de Oro: Franck Ribéry - Campeón de la Bundesliga, de la Copa Alemana, de la Champions League, de la Supercopa de Europa y del Mundialito de Clubes. 23 goles y 23 asistencias en 2013. El mejor año de la carrera del francés, que a sus 30 años ha explotado definitivamente como uno de los mejores jugadores del planeta. Elegido como el mejor jugador de Alemania por los capitanes de los equipos de Primera y Segunda, 'Scarface' anotó 10 goles y repartió 15 asistencias en la temporada 12/13, en la que el Bayern se adjudicó el título de la Bundesliga Alemana tras dos años sin conseguirlo. En Champions, el francés disputó hasta 12 partidos, siendo desequilibrante en dos fechas cruciales: en el Camp Nou, donde su equipo completó la hazaña de ganar por 0-3 con dos asistencias suyas; y en Wembley, donde participó en los dos goles -en el segundo, con un espléndido taconazo- que dio al Bayern la ansiada Copa de Europa frente al Dortmund (2-1). Su espectacular actuación fue clave para llevarse el premio al mejor jugador europeo que otorga la UEFA.




Pero el año 2013 no terminó en la temporada pasada para Ribéry, pues en la Supercopa de Europa frente al Chelsea anotó un soberbio golazo que forzó la prórroga, y en los penaltis acabaría ganando el cuadro alemán su cuarto título. El quinto llegaría en diciembre, con la consecución del Mundialito de Clubes en el que el francés disputó casi todos los minutos y asistió en uno de los goles de la victoria por 0-3 frente al GZ Evergrande. Con su selección estuvo a punto de quedarse sin Mundial, pero en el partido más importante, en el que Francia debía ganar por 3-0 para estar en Brasil, Ribéry completó una actuación magistral, asistiendo en dos de los tres goles.

Esta campaña ya lleva 6 goles y 9 asistencias en Liga -en 13 partidos-, y fue clave en la victoria por 1-3 en el Etihad Stadium frente al Manchester City (UCL). En su currículum hay algunas manchas, como frecuentes lesiones que le dejaron fuera de algunos partidos de Bundesliga y de la Supercopa alemana; o partidos en los que desapareció completamente -como en el Francia 0-1 España-, pero no hay duda de que Franck Ribéry ha conquistado todos los títulos individuales y colectivos (criterio 1), posee una clase portentosa que ha demostrado con creces (criterio 2), pone la guinda a una trayectoria espectacular desde que deslumbrara con 22 años en el Olympique de Marsella (criterio 3) y su personalidad, reflejada en las cicatrices de su cara, son las que le llevaron a salir adelante después del abandono de sus padres, del accidente que casi le mata con dos años de edad y de las constantes burlas que soportó cuando era niño a causa de su cara deforme (criterio 4). Ribéry vive en la polémica, ha sido protagonista de múltiples escándalos, se autoproclama el mejor del mundo, afirma sin tapujos que merece el Balón de Oro más que nadie... Pero es que quizás tenga razón..

@david_lrl


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