La Liga ha dado un vuelco. Mientras Atlético y FC Barcelona siguen ganando y volviendo a su situación anterior, el Real Madrid se hunde. Dos derrotas consecutivas, la última contra el Sevilla en el Pizjuán, dejan a los de Ancelotti como los más rezagados en la lucha por el título. Ahora las posibilidades de conquista son bastante menores.
Dos goles de Bacca aniquilaron a un Madrid que se había adelantado por medio de Cristiano Ronaldo, de falta. El conjunto blanco no creó ocasiones claras, y se mostró desesperado y atenazado por un rival que venía de ganar cinco partidos seguidos y de lograr la clasificación para cuartos de la Europa League. Ultra-motivación. La jugada de Rakitic, haciendo un sombrero a Pepe en el segundo tanto de Bacca, queda ya para los anales de la historia.
Atlético y Barça cumplieron en sus partidos frente a equipos de la zona medio baja. Los rojiblancos, que seguirán líderes a falta de ocho jornadas, vencieron al Granada gracias a un gol de Diego Costa en la segunda mitad. Los azulgranas ya habían finiquitado el encuentro frente al Celta en el minuto seis. Neymar firmó un doblete y Messi marcó su gol nº 22, pero la noticia del partido fue la terrible lesión de Valdés, que se perderá el Mundial al romperse el ligamento cruzado. De seis a ocho meses de baja.
El Athletic dio por fin una tregua a sus rivales por la cuarta plaza: empató en un partido tosco y con un clima desfavorable en el Martínez Valero, mientras Sevilla, Real Sociedad y Villarreal ganaban sus respectivos partidos. Amarillos y Txuri Urdin ganaron por la mínima a Getafe y Valladolid respectivamente, gracias a los goles de Carlos Vela y Jéremy Perbet. El equipo de Contra sigue sin ganar desde noviembre. El Villarreal corta una racha de cuatro partidos sin ganar.
El que se aleja un poco más de Europa es el Valencia. Se puso 0-2 en Almería con el gol más rápido de la historia de la Liga, obra de Keita; y el tanto de Edu Vargas, pero los de Francisco llevan jornadas demostrando que no se rinden: nada más comenzar la segunda parte y en un solo minuto, empató el encuentro por medio de Óscar Díaz y Corona.
Por abajo, el Rayo confirma su gran estado de forma. Tras una temporada calamitosa, el equipo de Paco Jémez se ha encontrado a sí mismo y ha conseguido cuatro victorias y un empate en los últimos cinco partidos. El triunfo frente a un rival directo como Osasuna -cinco derrotas seguidas- en el último minuto y de penalti riguroso, deja al Rayo a cinco puntos del descenso.
Pero el que se aferra cada vez más a una salvación casi imposible es el Betis, que ganó en el Ciudad de Valencia con goles de Salva Sevilla, Rubén Castro y Jorge Molina (1-3) y queda a siete puntos de la permanencia a falta de ocho jornadas. Muy difícil, pero en Sevilla todavía creen.
Y por último, el Málaga insiste en complicarse la vida. Ha conseguido ganar en sus dos últimas salidas, pero pierde sus partidos en la Rosaleda. El último, contra un Espanyol que tiene lejos Europa y no parece querer la clasificación. Sergio García -en su mejor temporada en Primera- y Pizzi fueron los verdugos en un partido cuyo protagonista fue Delgado Ferreiro.
Errores arbitrales: 3-Clos Gómez no pita penalti sobre Lafita en el Getafe-Villarreal, Delgado Ferreiro da como legal el gol de Pablo Pérez en fuera de juego. Iglesias Villanueva señala como penalti una falta que exagera el jugador del Rayo en el descuento.
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