En primer lugar, el Real Madrid acaricia prácticamente el título de Liga. Su victoria ante el Levante (4-2) unida a la derrota de un desconocido Barça en el Reyno de Navarra (3-2) hacen que la ventaja entre los blancos y azulgranas aumente a diez puntazos. Jamás nadie logró remontar esa cifra, ni siquiera nueve. La papeleta de los de Pep Guardiola es muy negra, y muchos piensan que el técnico azulgrana tiró la Liga alineando un extraño centro del campo (Mascherano, Sergi Roberto y Thiago Alcántara) y dejando en el banquillo a jugadores como Cesc, Xavi o Iniesta. ¿El Barça piensa ya en Champions y Copa? ¿Ha dejado de luchar por el título doméstico? Parece que sí. De todas formas, es increíble que un equipo que sólo ha perdido dos partidos en toda la temporada, pueda abandonar la carrera por la Liga en la jornada 22. Gran culpa la tiene un Real Madrid pletórico, que va camino de acabar con todos los récords: goles a favor, puntos conseguidos, victorias fuera de casa... y sobre todo, gran culpa la tiene Cristiano Ronaldo, que firmó un hat-trick, haciendo el gol 4.000 del club madridista en el Bernabéu y su gol nº120 en dos años y medio. Impresionante.
Si la lucha por la Liga ya parece decidida, agárrense porque el resto de posiciones ligueras están más en duda que nunca. Hace tiempo que no recuerdo una Liga que, a estas alturas, la mayoría de equipos estén tan cerca de Europa como del descenso. Sin ir más lejos, el Villarreal, 15º en la tabla, sólo está a seis puntos de Champions, pero a tres del descenso. Estamos ante una segunda vuelta apasionante donde casi cualquier equipo puede soñar con puestos europeos.
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| La lucha por la Champions, al rojo vivo |
Pero quien aprovechó de verdad la jornada fue el Málaga: ganó al Mallorca (3-1) mientras Levante, Espanyol, Athletic y Atlético pinchaban. La pelea por la cuarta plaza de Champions está más viva que nunca, y parece que a muchos les entra la pájara a la hora de pensar en la máxima competición de clubes. El Atlético, por ejemplo, desaprovechó la ocasión fallando lo indecible en el Sardinero, con la colaboración expresa de un gran Toño. El Levante poco pudo hacer en el Bernabéu, pero lleva siete partidos sin conocer el triunfo. Y el Athletic, que tenía un partido difícil en el Benito Villamarín, se dejó perder en el último minuto por un gol de Nelson desde fuera del área y baja hasta la novena posición. El Osasuna, que como hemos dicho, ganó al Barça (con dos goles de Lekic), sube hasta la octava posición y se queda a un solo punto de la cuarta plaza.
Quien se está alejando de manera sobrenatural de los puestos europeos es el Sevilla, que cayó ante la Real Sociedad en el estreno de Míchel como entrenador nervionense y ya encadena ocho partidos sin ganar, bajando hasta la 13º posición. Ya le ha pillado hasta el Villarreal, que estaba hundido hace unas semanas pero se ha reencontrado con su juego y está mejor que nunca. En su victoria ante el Granada por 3-1 se confirmó que si Borja Valero está bien, el Submarino puede salir a flote de cualquier percance. Lo mismo se podría decir de Michu, que está llevando en volandas al Rayo Vallecano gracias a sus goles. Con su gol ante el Getafe (el 11º de la temporada) situó al equipo madrileño a sólo tres puntos de Europa League y el honor de ser, por ahora, el tercer mejor equipo de la capital española.
Por último, destacamos la goleada del Valencia ante el Sporting (4-0) que cortó la racha de los de Emery sin ganar (llegó a cinco encuentros) y dejó en la estocada al Sporting, que despidió a Tejada y confirmó la llegada de Javier Clemente al banquillo asturiano. Sin duda, comienza una nueva era en el club rojiblanco, quizás en Segunda División.
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El mejor de la jornada: Llegó la temporada pasada como un delantero alto, fornido y goleador. Tanto Camacho como Mendilíbar contaron apenas con él. Sólo marcó dos goles en toda la Liga, pero uno fue decisivo en la permanencia de Osasuna en Primera División (el de la victoria ante el Sevilla en el último minuto). Aunque partía como suplente también este año por detrás de Kike Sola, Ibrahima y Nino, el tanque serbio se ha hecho con la titularidad en las últimas jornadas y por fin le llegó la confianza, y con ella los goles. Uno decisivo en el Molinón la pasada jornada para empatar un partido que se daba por perdido, y dos tantos esta semana al mismísimo Barça para lograr una victoria heroica y alucinante. Puede que sí, que haya sitio en esta Liga para un delantero tan espigado como Dejan Lekic.
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