James lidera la sensación del Mundial

El crack del Mónaco mete dos goles para clasificar a Colombia a cuartos de final por primera vez en su historia (2-0)

Colombia es la sensación del Mundial. Ha ganado sus cuatro enfrentamientos, con un balance de once goles a favor y solo dos en contra. Su fútbol es efectivo, no da pie a ninguna duda, y posee jugadores que deciden partidos. En ausencia de Radamel Falcao, de los cafeteros ha erigido un líder al que todo el mundo adora. Hasta Barça y Real Madrid suenan ya como pretendientes. No es para menos, porque la verdadera estrella del campeonato no es Neymar, ni Messi, ni Robben. Se llama James Rodríguez y es colombiano.

Desapercibido para el gran público al jugar en la Ligue 1, James se ha mostrado a ojos del mundo en este Mundial en el que ha aprovechado cada minuto como si fuera el último. Su temporada en el Mónaco, club que le fichó del Oporto por nada menos que 45 millones de euros, ha sido prolífica en cuanto a goles (9) y asistencias (13), incluido además en el XI ideal de la competición francesa. Su capacidad, por tanto, no es nueva. Pero aun así, está asombrando a propios y a extraños.

Se ha echado el equipo a la espalda. Ya es el máximo goleador colombiano en fases finales, y sus primeros cuatro partidos en una Copa del Mundo son mejores que los de Pelé, Maradona o Messi. Fue nombrado mejor jugador de la fase de grupos por la FIFA, pero está llamado a hacer cosas más grandes en Brasil. En octavos, ronda que jamás había superado su selección hasta ahora, el rival era Uruguay y el partido era absolutamente físico. Los colombianos tenían la pelota pero eran incapaces de encontrar un hueco en la ordenada defensa charrúa. Entonces, apareció James.

En realidad, era uno de los pocos balones que había tocado hasta ese minuto, el 28, cuando un balón que cayó del cielo fue controlado por el crack del Mónaco en la frontal del área. El misil, que salió de sus botas sin tocar el césped, fusiló a Muslera tras tocar en el larguero. Probablemente, el mejor gol del Mundial hasta ahora.

No sería su único tanto. Nada más arrancar la segunda parte, un buen centro de Armero desde la izquierda fue cedido de cabeza por Cuadrado a James, que de nuevo batió a Muslera con un certero remate desde dentro del área. Era su quinto gol, el que le colocaba como pichichi en solitario. El que duplicaba la ventaja de una Colombia imparable.

Uruguay reaccionó más con empuje que con juego. Encerró a Colombia, que se dedicó a salir al contraataque. Los ataques charrúas eran, en su mayoría, inofensivos. Pesaba mucho la ausencia de Suárez, sancionado por el mordisco a Chiellini. Cavani, el elegido para asumir la responsabilidad de liderar al cuadro de Tabárez, no fue capaz de echarse el equipo a la espalda. Los intentos se redujeron a disparos desde fuera y un remate de Maxi Pereira que salvó Ospina con una gran salida.

Entre el portero colombiano y el jugador por excelencia del torneo condujeron a los cafeteros al sueño de cuartos de final. El rival, Brasil. Imposible tener miedo al anfitrión. De este ser un deporte donde los nombres y las presiones no importaran, Colombia sería la gran favorita no solo a derrocar a Brasil, sino a ganar este Mundial del que ya son el rival a batir.

FICHA TÉCNICA

COLOMBIA: Ospina; Zúñiga, Zapata, Yepes; Armero; Abel Aguilar, Carlos Sánchez; Cuadrado (Guarín), James Rodríguez (Adrian Ramos); Teófilo Gutiérrez (Alexander Mejía) y Jackson Martínez.

URUGUAY: Muslera; Maxi Pereira, Giménez, Godín, Martín Cáceres; Álvaro González (Abel Hernández), Arévalo Ríos, Álvaro Pereira (Stuani), Cristian Rodíguez; Forlán (Gastón Ramírez, m.63); y Cavani. 

GOLES: 1-0, m.28: James Rodríguez, con un gran disparo desde la frontal. 2-0, m.50: James Rodríguez, tras cesión de cabeza de Cuadrado.

ÁRBITRO: Bjorn Kuipers (HOLANDA) amonestó a Giménez y Armero. 

INCIDENCIAS: Partido de los octavos de final del Mundial de Brasil jugado ante 73.804 espectadores en el estadio Maracaná, de Río de Janeiro.

MVP: James Rodríguez

@david_lrl